El experto Marc Teyssier, investigador en el ámbito de las pieles artificiales y las interfaces de piel, se ha empeñado en reinventar el concepto de la Nueva Carne que el cineasta David Cronenberg creó en sus obras. Y el resultado va más lejos aún.
Imagina una webcam (la cámara que suele ir encima de la pantalla de una laptop o pc), ya sea integrada o enganchada si es externa con forma de ojo humano, que te sigue a donde te mueves. Mira arriba, abajo, a los lados… Y ahora imagina que la cámara está cubierta por una piel artificial que la hace parecer un ojo humano a todos los efectos, con cejas y pestañas. Y capaz de parpadear, de hacer guiños.
¿De locos, cierto? Pues espera a verla en movimiento, porque esa es la creación de Teyssier: una webcam que imita a un ojo humano y que te observa, que se ‘despierta’ cuando enciendes el portátil, y se va a dormir incluso.
Con el toque más perturbador, la cámara es un proyecto de investigación del laboratorio de Interacción Humano-Computadora de la Universidad Saarland, que se hace la siguiente pregunta: “¿Cómo interactuaríamos con nuestros dispositivos si fueran más humanos? ¿Cómo cambiarían nuestros patrones de comportamiento si la vigilancia a nuestro alrededor se sintiera mucho más tangible?”
Su estructura está compuesta de tres partes principales: la capa de la piel, el sistema musculoesquelético y el globo ocular. En tanto, una pequeña cámara instalada al interior de la pupila puede registrar imágenes en alta resolución.
Según el desarrollador, el objetivo de esta singular cámara es invitar a reflexionar en torno al avance de la tecnología, ya que ahora, según él, vivimos en una sociedad repleta de dispositivos que cada día nos vuelven más insensibles.